Margaux

Vino Tinto Ensamble Château Margaux 2017.

Desde el siglo XVII, el primer vino de Château Margaux ha sido reconocido como uno de los mejores vinos del mundo entero.

Debe sus cualidades únicas al genio de su terruño, así como al trabajo apasionado de una sucesión de generaciones. Es un vino extraordinario fruto de una combinación de características que sólo se encuentran en contadas ocasiones: finura, elegancia, complejidad, densidad, intensidad, longitud y frescura. Aunque su concentración tánica sea excepcional, es raro detectar astringencia.

Las grandes añadas se distinguen por su formidable capacidad para emocionarnos. Las añadas menores dan placer a los sabios aficionados. Ofrecen la ventaja de evolucionar muy rápidamente y, revelar, al cabo de unos años, en lugar de potencia, esa sutileza que es prerrogativa de los grandes terruños.

Château Margaux posee una extraordinaria capacidad de evolución. A lo largo de los años, ha desarrollado una finura, una complejidad aromática y una notable presencia en boca.

2017

La calidad del Château Margaux 2017 se acerca a la de sus ilustres predecesores sin pretender rivalizar con la generosidad de 2015 o la elegancia de 2016. No obstante, ocupa un lugar legítimo en el linaje de las grandes añadas de la finca: es profundo, complejo, intenso y largo. En algunos aspectos, incluso supera nuestras expectativas tras las lluvias de septiembre y demuestra una vez más hasta qué punto los grandes terruños son capaces de transmitir al vino todas sus mejores cualidades.

Las catas iniciales del proceso de vinificación ofrecieron un momento de asombro. Los lotes de Merlot son notables: los aromas son afrutados y suaves, una redondez en boca y un rico volumen hicieron posible incluirlos en una proporción del 8% para el primer vino. El Cabernet Sauvignon es siempre el corazón y el armazón de Château Margaux, ya que representa el 89% de la mezcla. En la cata, los taninos estaban perfectamente maduros, lo que nos reafirmó en el acierto de nuestra decisión de esperar unos días más antes de la vendimia. La estructura de los vinos sigue siendo una rara combinación de potencia y refinamiento. Cabernet Franc (2%) y Petit Verdot (1%) completan la mezcla de este vino. Château Margaux representa el 37% de la cosecha.

CLIMA

Tras un 2016 relativamente seco, los primeros meses de 2017 trajeron las precipitaciones necesarias para mantener equilibrada la capa freática. Las temperaturas invernales no fueron especialmente frías. Las vides brotaron en torno al 4 de abril, pero no fuimos lo suficientemente precavidos con las temperaturas primaverales y una helada en las noches del 27 y 28 de abril sirvió para recordar que, ante todo, los viticultores dependen de la naturaleza. La elección del emplazamiento de nuestras parcelas de viñedo nos permitió limitar los daños causados por las heladas: sólo el 10% de nuestras cepas tintas se vieron afectadas.

En todo el ciclo vegetativo, sólo la última semana de junio se registraron precipitaciones importantes. Las vides ya habían florecido entre el 25 y el 30 de mayo en las condiciones más favorables para una polinización eficaz y homogénea. El verano de 2017 se pareció más o menos al de 2016: cálido y muy seco durante julio y agosto. Unas ligeras precipitaciones a principios de septiembre fueron lo único que truncó una rara oportunidad de producir una tercera gran añada después de 2015 y 2016; acabábamos de vendimiar nuestras uvas blancas cuando las fuertes precipitaciones echaron por tierra nuestras esperanzas de un año realmente sobresaliente.

Tuvimos entonces que tomar una decisión crucial: vendimiar rápidamente las uvas que aún no estaban suficientemente maduras por miedo a que la botritis las arruinara, o esperar a que volviera el sol y vendimiar las uvas más maduras y concentradas más tarde, en septi